Todo en el Señor tiene su tiempo. Eclesiastes, el predicador, nos dice que hay tiempo para todo: reír, llorar, levantar, derribar, construir, etc. Como todo en esta vida tiene su tiempo (cronos), también en el Señor todo tiene su tiempo (kairós). Mientras tu te deleitas en el Señor en tu cronos, El se deleita en ti en su kairós. El tiempo de Dios, kairòs, ha llegado para ti. Estas a punto de entrar en una dimensión espiritual que nunca antes había experimentado. Muchas de las promesas que recibiste a través de palabras proféticas dadas por verdaderos hombres y mujeres de Dios estan a punto de hacerse una realidad patente en tu vida. Solo espera en El, y El hará y suplirá, y multiplicará Sus bendiciones sobre ti. Antes anduviste de promesa en promesa ahora andaraas de cumplimiento en cumplimiento de cada una de esas promesas. DIOS TE BENDIGA.
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